jueves, 25 de agosto de 2011

La Venida Catastrófica


La venida catastrófica:
No supe a ciencia cierta cuanto tiempo nos tomo para llegar a Susquehanna, Fawn Grove, solo sabia que era plena mañana cuando pisamos suelo, estaba extenuada y adolorida, por esa razón a rastras me sacaron de avión.
Con los ojos casi cerrados llegamos al aparcamiento donde nos esperaban casi toda la familia, solo Jake faltaba allí. Mi padre se ofreció a cargarme hasta la camioneta.
Escuche sus murmullos cuando vieron mi estado físico, quería decirles que no se preocuparan, pero mi cansancio no me permitió hablar, el débil movimiento, movimiento del auto por la carretera me hiso dormir todo el trayecto, solo fui consiente que mis padres se sentaron conmigo en el asiento de atrás.
No supe quien condujo, no supe la hora exacta, me sentía caliente y protegida, eso era lo único que conocía y juraría.
Débilmente sentí cuando me sacaron del coche, escuche como murmuraban por mí, estaba preocupados por mi estado, no tenían por que hacerlo, me sentía bien, solo necesitaba dormir.
No sufrí de opresión alguna, dormí libre de pesadillas, me estire en mi cama, estaba totalmente envuelta, podría comentar que todo lo ocurrido en estos cinco o mas días fueron producto de mi imaginación, pero al ver mis ropas asimile todo, furtivamente mire el reloj de la mesita de noche, el reloj marcaba las cuatro de la tarde, tome asustada el espejo de mano que tenia allí. Con la respiración acelerada observe minuciosamente mi cuello…
La parte, donde fui dañada estaba casi sanada, casi no se notaba con la excepción que la parte estaba de un tono crema, suspire, esperaba que se desapareciera, no quería tenerla. Con locura me quite de un tirón mi pantalón, allí tenia la misma marca. Me tense, al recordar el ataque de los vampiros. Un llamado de nudillos me hico dar un brinco…
-A- adelante-. Dije cuando controle el ritmo de mi corazón.
Mi madre se asomo en la puerta, con verdadera cara de vergüenza, eso me desconcertó, la única que tendría que estar así era yo, no ella.
Casi me hace brincar nuevamente cuando la tuve en menos de un segundo junto a mí, eso se salía de lo habitual, usualmente caminada normal hasta mí. Se sentó muy cerca de mí, acaricio la arruga que se había formado en mi frente.
-Hola mamá-. Musite entregándome a su muestra de afecto.
-Hola-. Contesto casi inaudible, suspiro entonces.
-Te debo… les debo a toda la familia una disculpa, me siento muy apenada, no hay palabras para describir el estado en el cual me siento, fui una imprudente al alejarme de esa manera de casa, no medí los riesgos que esto produciría, me siento sumamente mal, yo… yo no tengo palabras para justificar mis hechos, yo…-.
-Shhh… calla Nessie, no tienes que justificarte, todos te entendemos, nadie te recrimina por eso-. Me interrumpió ella.
Junto nuestras frentes, pequeñas lágrimas se desbordaron de mis ojos, no era la reacción que esperaba, ¡por mí culpa!, por mi insensatez se habían sumido a disputas, yo era culpable, no tenia que mostrarse tan comprensiva conmigo, esto solo incrementaba mi culpabilidad.
-Mamá-. Musite cuando cerró los ojos, no tenia que hacerlo, yo deseaba que me gritara para sentirme mejor.
-No te regañare Nessie, en absoluto,  no te sientas mal… no te sientas mal… deja de llorar-. Susurro, sin duda le había fallado, de había decepcionado.
-¡No mamá!-. Me queje tomando entre mis manos, su atractivo rostro herido. -No trates de tapar el sol con un dedo, les he fallado a todos, me fugue de casa, no les comunique nada por dos días, no trates de minimizarlo, no…-.
-Shhh… Nessie, calla, no tienes la culpa-. Me volvió a decir.
Apreté los dientes, la culpabilidad no cesaba en nada, con su comportamiento solo lograba que me sintiera peor.
-No madre, ¿Quién es el culpable, entonces? Yo fui la que escapo, yo fui la que resulto herida por vampiros sádicos, por desobediente, no mamá, solo incrementas mis penas, por mi culpa discutisteis con mi padre, es a mis hombros en los que recae la culpa, no sigas así…-. Espete.
-Tu madre y yo peleamos por nuestros errores, no tienes nada que ver con eso, no te culpes hija…-. Comenzó a decir, puse un dedo índice en sus labios para callarla.
-No-. Negué febrilmente con la cabeza. –Yo soy culpable-.
Tomo mi mano que la encubría, acomodo mi mano en su mejilla, le dio en pequeño beso en mi palma, tenia su expresión tranquila, pero podía decir que, lagrimas silenciosas descendían se sus ojos. Ella nunca me diría lo que pensaba en este momento, parecía una carcelera de su propia boca.
Otra persona llamo con nudillos a la puerta, mi madre se todo a la tarea de franquearla, mi padre estaba allí, con la misma expresión.
-Nessie-. Musito mi padre, su rostro se torno enojado.
 Por fin me dirían mi veredicto, lo tomaría feliz, aunque eso significaba décadas de encierro, estaría rezongando y aplaudiendo, porque al fin, tomaría lo que merecía. Mi padre leyó claramente lo que pensaba, entrecerró los ojos.
-Bella, hazme el favor de no ocultar sus pensamientos en este momento-. Refunfuñó él.
Abrí los ojos como platos, eso provoco su desconfianza, no fue mi canto de victoria.
-Edward…-. Resoplo mi madre, él le frunció en entrecejo.
Me causaba verdadero dolor esto, tape mis oídos con mis manos para evitar escuchar esto, grite para callarlos.
-Dejad de discutir, no se dan cuenta que me lastimas vuestra acritud, ¡Mamá!-. La mire exasperada. –No se puede cubrir el sol con un dedo, dejad de ocultar mis pensamientos-. Demande.
Los dos abrieron los ojos como platos, sin duda nunca vieron venir esta actitud de mi parte, pero eran ellos los que me hacían actuar de esta manera, tenían que regresar a ser los mejores padre del mundo, tenían que abandonar su estado enfermizo, no quería que estuvieran en disputa.
-Bella-. Dijo nuevamente mi padre, ella se negaba a retirar su escudo de mí.
Vi perfectamente como a regañadientes cedía, mi padre y yo suspiramos, ella siempre era terca.
-Nessie-. Demando mi atención él, la apaleó de inmediato. -¿Me puedes explicar el porque de ti fuga? Todos estuvimos realmente angustiados por tu falta de quicio, dame una justificación para asimilar tu conducta-. Su tomo mandón me hiso saltar en un inicio, era lo que merecía.
Trague saliva ruidosamente, me prepare para mi respuesta, era lo que merecía.
-por cierto, no trates de cubrir a Jacob, se perfectamente que él es culpable de tu conducta desenfrenada-. Asentí llena de valor.
-Si-. Susurre, mi padre respiro tranquilo. –Fue Jake que se atrevió a decirme lo que nadie tuvo los pantalones necesarios de decírmelo, no lo culpo y no deseo que le recriminen nada-.
En mi mente recordé claramente la discusión que tuvimos, no me di cuenta que mi madre aun tenia su mano sobre la mía, ella también lo vio con claridad.
 Escuche sus bufidos de irritación, la cara de mi padre de vio fiera, sus facciones fueron de vampiro, mi madre mostro los dientes, se puso de pie en un segundo, abrió la puerta en menos tiempo, está  traqueteó, mi madre echaba humo, temí por mí, temí por todos.
 Mi padre se fue detrás de ella, yo quería que me dijeran que era lo que sucedía en este momento.
-¿Qué sucede?-. Grite llena de angustia.
Me ignoraron, fui ignorada, era la primera vez que sentía esta sensación, era horrible.
Salte en la cama cuando escuche el ruido de un árbol vapuleados, las lágrimas regresaron a descender de mis ojos, con una bocanada de aire saque mi pierna que estaba en vía de recuperación.
La camiseta era suficientemente larga para tapar mis glúteos, me sentí un tanto mareada cuando estuve de pie, me apoyé en el respaldo de mi cama, camine y me asome por el gran ventanal,  la vista panorámica se tiño se rojo.
Jacob estaba abajo, se miraba como conejillo de india, como cuando mi madre se enfureció con él hace ya tantos años, coloque mis dos palmas en el vidrio, casi lo quiebro.
-¡Maldita sea Jacob!-. Gruñó mi madre. – ¡No puedo creerlo, por tu estúpida convicción Renesmee casi muere!-.
-¿Qué dices?-. Dijo en tono de confusión.
-¡Si!-. Grito ella furiosa. –Renesmee fue atacada por vampiros en Knoxville, estuvo a punto de morir, ¡Jacod casi muere!-. Coreó histérica.
Mi padre se poso detrás de ella, entonces todas la piezas encajaron… sentí una especie de estocada.
Cuando mi madre me busco no espero por una justificación o convicción de parte de Jacob, bien podía ver la escena sin estar presente. Mi madre se puso como loca ha buscarme, mi padre al ser un lector de mentes, supo cada detalle de mi discusión con Jake, seguramente no tuvo la oportunidad de contárselo a mi madre, ella se puso al lado Jake, como siempre, mi papá se puso como exasperado, he allí el porque de sus discusiones, mi mamá nunca supo con detalle lo que había sucedido, y ahora que estaba enterada, quería degollar a Jacob.
Otra estacada… Jacob tenia una venda en el brazo, seguramente se peleo a golpes con mi padre, seguramente le había roto el brazo, lleve mis manos a mi cabeza, esto se saldría de equilibrio.
-¡Maldita sea Jake!, te he defendido como siega, he tratado de ser sensata en todos los sentidos, pero ahora, ¡tú has sido la gota que ha colmado mi vaso!-. Jacob tembló tenuemente.
Así que eso había sucedido en verdad, los hechos lo delataban, mis padres habían discutido por Jake no por mí, mi padre se había enfurecido con él, mi madre había puesto sus manos por Jacob, ahora era mi mamá la que se oponía a él, ¡la manzana de la discordia!
-Yo… yo-. Tartamudeo, claramente no sabia que responder a la acusación.
Como si fuera poco, Seth apareció de repente seguido de Aleah, quizá Jake pidió su ayuda con mi rastreo, todo empezó a dar vuelta, mas bien, ¡yo era la mareada!
-¡Ja!, por tú culpa ella se fugo, me has decepcionado Jake, has hecho que todos nos viéramos en este aprieto, no hay justificaciones, me vale un comido lo que creas correcto, ¡Nessie no es un objeto al cual puedes poseer cuando se te plazca!-. Elevo su voz por tres octavas.
La familia se vio reunida en un segundo, todos estaban al lado de mi madre, solo Seth y Aleah estaban de su parte, yo lloraba como niña, nunca escalopé las consecuencias que todo esto traería, nadie se dio cuenta que lo estaba presenciando.
-Bella, ¡cálmate por favor!-. Pidió él.
-¡No!, ¿Cómo quieres que me calme? ¡Ya me canse de tu pobre razonamiento!, ¡No me importa tu imprimación! ¡No me importan tus justificaciones y tus “supuestas cavilaciones”!, ¡Su vida estuvo en juego!, ¡Casi muere, maldita sea! ¡Jodete!-. 
Mi madre le tomo de un brazo pero ella se lo sacudió, me sentía impotente, no podía…
Sentimientos encontrados, sentimientos encontrados, ¡sentimientos encontrados!…
Empañe con mis lagrimas el vidrio, no deseaba que mi madre le lastimara, él seguramente no se defendería en nada, sus brazos tensos esperado un ataque lo mostraba, no saldría sano y salvo, le costaría una fractura o un brazo, la fría mirada de mi madre lo demostraba, él temblada como chiquillo asustado.
Sin duda mi tía Rosalie estaba de acuerdo con mis padres, los demás no sabían de que lado estar, pero seguramente por mí, todos estaban en contra de Jacob, Seth se encamino para acercarse mas a su antiguo alfa, él le brindaría hasta la muerte su apoyo, aunque mi padre fuera su mejor amigo.
Todos los recuerdos vivieron a mí, todos y cada uno de ello inundaron mi mente, sentía que yo sufriría y sentiría cada golpe que recibiera Jake como si fuera yo la victima, no se defendería, no se enfrentaría a mi madre, todos estaban listos para cualquier cosa, para defender a mi madre, o para apartarla de él cuando fuera necesario.
-Bella…-. Murmuro nuevamente.
-¡Cállate maldito perro! ¿Como osas a hacerme esto? ¿Piensas que no sufro, que soy una desconsiderada? He callado por muchos años lo irritada que me siento cuando tus ojos se clavan en ella, como un verdadero baboso, ¡odio tu estúpida creencia que sientes en ella!-. Confeso.
Se me callo las fauces, ella nunca lo había confesado y escucharlo de ese modo era inefable…
No quería que le dañara, no quería que le hiriera, yo lo sufriría, sentiría el mismo dolor que le infringieran, yo lo viviría en carne propia.
Seth temblaba de pies a cabeza, sin duda daría hasta su vida por tratar de protegerlo, mi madre estaba cegada por la rabia, no dudaría en estamparse con él por cruzarse en su camino.
Por un momento fue como si yo viera entre sus ojos, como si yo viera entre ellos el rostro rabioso de mi madre, le temía, me daba terror y un miedo profundo sus facciones terroríficas, se miraba como la diosa de la muerte, feroz, imparable, fuerte he inmortal.
Nadie sabia que miraba desde la ventana, había estado ciega, me había engañado y engañado a mis padres, a mi familia, nunca estuve equivocada, el temor a mis padres me mantuvo así todos estos años, el miedo a su oposición, a su negación, con lágrimas  escurriéndose acepte todo…
Le amaba, le amaba como amante, no como hermano, amigo o confidente, su dolor y miedo eran míos también, no quería que le hirieran, no quería sentir su rabia sobre mí, si le lastimaba sentiría a la perfección como mis huesos se romperían, gritaría y me retorcería de dolor.
-¡Jacod!-. Bramido nuevamente mi madre sin poder contenerse.
En menos de un segundo dejo escapar un gruñido gutural de lo más prominente de su garganta, escuchar ese sonido hiso que los vellos de mis brazos se erizaran, mi padre y mi tío Jasper lo vieron venir, se agazaparon rápidamente y la tomaron por los brazos, mi madre era tal letal, que aunque había dejado la superior fuerza en su temporada como bisoña siempre era muy fuerte, los arrastro hasta que tío Emmett también intervino.
Jacob no resistiría otro ataque, mi padre lo había dejado mal herido y si mi madre lo hacia, seria letal, sentí miedo en todo mi ser, mi madre no dejaba de gritar maldiciones al aire, abrí la ventana francesa y me lancé al techo, sentí el malestar de mi cuerpo al hacer este salto, conteniendo mi respiración, aterricé en el suelo.
-¡Nessie!-. Me regaño mi madre.
Quizá esperaba que estuviera de su lado, con todo el dolor de mi alma, me aleje de ellos y cubrí con mi cuerpo a Jake, no permitiría que le dañara mas de lo que estaba, no importaba que fuera mi madre, en este momento mi prioridad era él.
-¿Nessie que haces?-. Dijo en tono de desconcierto. –Regresa a tu cuarto, tus heridas no están del todo sanadas-.
-¡No!-. Mi tono fue de terquedad, todo mundo me miro chocante.
-Nessie… ¡Aléjate, no te metas en esto!-. Grito mi padre.
Temblé al sonido de su voz, pero mas grande era mi necesidad de proteger a Jake que su irritación en este instante, empuñé mis manos, me enfrentaría a ellos si era necesario. Negué con la cabeza, en ese mismo instante, sentí la mano de Jake en mi hombro izquierdo.
-Nessie, Edward tiene razón, ve y recupérate, no te veas implicada en esto por…-.
-¡No!-. Me limite a decir.
-¡Nessie!-. Rugió mi madre en son de reproche.
Las lagrimas comenzaron a descender, la desobediencia no era mi predilecta, odiaba verme en estos aprieto, sentía la refulgencia de Jake a tras de mí, sentía su respiración entrecortada, quería que me tomara de la mano para infundirme temor a lo que iba ha hacer en este momento, mi deseo era que nadie saliera lastimado (emocionalmente hablando).
-Mamá cálmate ¿si?, Resolvamos esto de una forma civilizada-. La voz se me corto en dos ocasiones.
-Nessie no…- comenzó a decir.
-No… ¡No tú mamá!, ¡Tranquilizaos por favor!-. Pedí.
Me desconocí totalmente, era la primera vez que le hablaba así a mi madre, todos lo sintieron, no quería ser insensata, ya era mucho con lo que les había hecho el fin de semana pasado, ya era suficiente, todo…
Sus ojos se movieron como si quisieran llorar, y claro esta, sus lagrimas eran mudas he invisibles, me sentí mal por eso, este dolor me lo llevaría hasta la muerte, mi alma no descansaría aún, cuando estuviera muerta y soterrada a cien metros.
Mi padre sabia perfectamente lo que estaba apunto de hacer o decir, abrió la boca y allí se quedo hasta que yo fui capaz de decir lo que tanto me subyugaba, tome una bocanada de aire, Jake y yo seriamos los que mas sufriríamos en esto, no tenia otra opción, era lo mejor para los dos, para mis padre, para todos…
-Esta bien-. Acepto ella, respiro profundamente en tres ocasiones, sus facciones se relajaron.
Yo era consiente que todo mundo tenia sus ojos puestos en mi rostro, traque saliva ruidosamente, sentía un vértigo amenazando con derivar todas mis fuerzas con el simple aire que pasara, la fuerza gravitatoria me hacia temblar tenuemente.
-Antes que nada, quiero pedirte algo mamá-. Susurre.
Fui consiente que mi padre apretó uno de sus brazos, haciéndole ver que no tenia que temer, o desconfiar, fulmino con la mirada a Jake, sentí por un momento que sus ojos podían ver, como rayos “x” porque Jake trago saliva.
Suspire, camine la distancia que nos separaba, encumbré mi mano derecha para que entendiera a que se debía tanto sortilegio, no se porque razón ella temblada entre los brazos de mis tíos y mi padre, seguramente temía lo peor de mí, quería asegurarle que no debía de temer, ya no sucedería jamás.
Contemplo con sus ojos topacios mi mano alzada, frunció sus labios considerando estrechar la mía, con un suspiro lo hiso, ella ya se encontraba totalmente tranquilizada, ellos la dejaron libre para posar toda su atención en mí, estiro una de sus manos temblantes, sentí su tacto frio en las yemas de mis dedos.
Cerré mis ojos, estada avergonzada y dolida para verla a los ojos en este momento, escuche los pasos de Jacod desesperados por saber que era lo que ocurría, un resoplido de mi madre le previno a venir a donde nos encontrábamos. Le confesé todo, ella simplemente suspiro, al abrir mis ojos, vi su estado taciturno, adivine a que nunca quiso verse en algo como esto, pero ¿que mas podía hacerse? Ella termino asintiendo, se alejo de mí junto a mis tíos, ella busco el apoyo de mi padre, escondió su rostro en su pecho, indispuesta a mostrar realmente lo que sentía en este preciso momento.
-Dejemos a Nessie y a Jake solo por un momento-. Susurro mi padre.
Mis abuelos fueron los primeros en acceder a la petición de mi padre, mi tía Rosalie bufo en respuesta, pero rápidamente intervino tío Emmett tomándola de un brazo y halándola para llevarla adentro de la casa, mi tía Alice se acerco a mi madre para consolarla, ella se vio a la obligación de no sacudir sus brazos, mi madre parecía como árbol plantado en el suelo, estaba indecisa al dejarme sola con Jake, seguramente temía que escapara de nuevo, no lo haría, ni ahora, ni mañana ni siempre…
Seth y Aleah se vieron indecisos en que hacer, cuando pase a su lado, le pedí un favor mudo, ella asintió dispuesta.
Sentía que a cada paso que daba, mi corazón se fragmentaba y se cortaba, sentía que moriría al momento de confesar y liberarme de todo lo que me consumía por dentro, un nudo se formo en mi garganta…
Camine hasta que estuve segura que me encontraba suficientemente alejada de casa, para que solo Jacob y yo fuéramos participes de esta conversación, después, tal vez, Aleah se uniría a nosotros.
-Sabes…-. Dije consiente que se encontraba detrás de mi espalda. –Lo que ha pasado en estos días no me enorgullece en nada, habría querido que las cosas no hubiese sido tan… tan enfermizas-.
-Si, estoy de acuerdo contigo-. Murmuro.
-Veras Jake, las cosas entre todos se a… complicado, tanto así, se salido de nuestras manos y… no se que vendrá mas adelante-.
El silencio reino por dos minutos aproximados, aun no tenia las fuerzas necesarias para verle a la cara, sabia perfectamente que, cuando lo hiciera, todas mis fuerza fenecerían, tenia que soportarlo…
-Si, también estoy de acuerdo en eso, es algo que no será fácil de olvidar o pasar en alto, tomando en cuanta que Bella se puso como loca-. Suspiro. –Esta no me la perdonara nunca, espero que lo haga, por el amor a lo mas sagrado-. Solo me limite a asentir.
Al ver que me había quedado sin habla, prosiguió:
 -Desearía que hubiera una forma para cambiar lo de hace un rato, y mas, lo que sucedió el pasado fin de semana, no escalopé las consecuencias que nuestra, ejem, discusión traerían-. Se aclaro la garganta, yo hice lo mismo. -¿Te encuentras bien?-.
¿Qué si me encontraba bien? ¿Qué si la estaba pasando como domingo en la tarde? ¿Qué él único que sufría era su persona? ¿Qué no me dolería en nada lo que estaba a punto de hacer o decir?
-Claro-. Respondí de inmediato. –Las extremidades poco me duelen-. Mentí.
Simule que me distraía la tenue luz fritada del sol, captaba mi atención, me sentía frívola, hueca tanto por dentro como por fuera, me mordí la lengua para no decir nada, nada aún.
-Tus piernas tienen buen aspecto, no se nota en nada que hayas sufrido una lesión-. Comento monocordemente, quería distraerme, cambiar la conversación.
-Si, al parecer, la ponzoña vampírica nos sirve a los híbridos como analgésico-. Conteste apesadumbrada. –Ya no me duele en nada-. Agregué.
No había manera de que yo iniciara, o que fuera la precursora de tan mala noticia o condena, no quería que Jacob se viera siempre en riesgo, no… ya no más, esto tenia que acabar ahora, en este preciso momento.
-Y bueno, ¿De que querías hablar?-. Inquirió de repente, como si leyó lo que tanto me mortificaba.
Al estar helada (literalmente hablando) no sentí nada que me empujara a decirle de que venia las cosas, moví mis dedos de las manos nerviosamente, los sollozos amenazaban con condenarme. Escuche sus pasos sobre la tierra húmeda, sentí su aproximación perfectamente, no me aparte de él, no estaba lista aun para hacerlo, con el dolor de mi alma le permití tomar uno de mis brazos, sentí sus dedos cálidos cerrarse en mi contorno.
¿Cuántas veces lo había hecho Jacob? ¿Cuántas s veces lo había percibido de esta manera? ¿En cuantas ocasiones me había hecho estremece de esta manera? ¿Cuántas veces había disfrutado de su tacto?
Le permití que girara mi cuerpo, no sin antes cerrar mis dientes con fuerza, no sin antes jurarme a mí yo interno que todo terminaría en este momento, no sin antes tomar aliento…
Estuve frente a frente con él, me las arreglé para mantener inexpresivo mi rostro, sus ojos oscuros fueron mi perdición.
-La verdad Jake…-. Inicie con el veredicto. –No creo que nadie pueda olvidar lo que paso ahora-.
Le frunció en ceño al suelo, pateo con uno se sus pies a una pequeña roca, espere pacientemente por su respuesta.
-No creo que Bella o Edward me perdonen lo que hice hace unos días contigo, seré paciente, lo único que me importa es ganarme tu perdón-. Susurró al fin.
-No tengo nada que perdonarte Jake, es mas, la que debe disculparse soy yo por tomar esa conducta, imprudente y temeraria, fui yo ya que no midió en ningún momento lo que esto ocasionaría-. Me callé, lo voz se me quebrada, así no ayudaba en nada, solo empeoraba las cosas.
-Es un consuelo saberlo-. Espeto para si mismo. –En fin, en realidad, ¿A dónde nos lleva todo esto?-.
¡Tierra ábrete en dos y trágame!
Era el momento de hablar, mis minutos y segundos de receso habían expedido, Jake quería que le confesara todo, así era.
-Quiero pedirte algo-. Confesé. –Y quiero que me prometas que lo cumplirás-. Le llevo medio minuto afirmarme con la cabeza, estaba segura que se arrepentiría cuando se lo indicara. Seria una eterna desgraciada cuando se lo pidiera.
-Quiero que te vallas de aquí-. Dije sin nota de debilidad en la voz.
Sus labios rojos se pusieron purpuras cuando lo escucho, escuche perfectamente su tosco corazón trabajar mas rápidamente, sus ojos dejaron de brillar como lo hacían cuando me miraba, la respiración se le dificulto un poco…
-¿Qué?-. Exclamo, repentinamente ofendido.
-Lo que escuchaste, te pido que te marches, ¿No lo entiendes?-. Murmure amargamente.
-¿Y por que lo pides?-. Escudriñó desconcertado.
¡Miente!, ¡miente por lo más sagrado!
-¿Acaso no es muy obvio? ¿No has tenido los ojos abiertos todos estos años, meses y días?-.  Inquirí con sarcasmo. -¿Deseas que te lo recuerde? ¡Mis padres no lo pueden tolerar mas Jake!-.
-No tienen que tolerar nada, ellos saben perfectamente que nunca podremos estar juntos, que lo único que nos une es nuestra hermandad, porque eso es, ¡Somos hermanos!-.
No puedo ser tu hermana, porque te amo mas de lo que te imaginas
-No te engañes Jake-. Masculle. –Todos sabemos perfectamente que no es así, tú me miras de una forma muy distinta a una hermana, esto no puede seguir más, lo siento, se acabo-.
Le frunció en entrecejo nuevamente al suelo, sus manos temblaron tenuemente, no era el efecto que traía cuando trataba con todas sus fuerzas de no transformarse, ahora lo que lo tenia así eran mis palabras venenosas.
-Tienes razón, estoy cansado de contenerme, lo que siento por ti va más allá que una simple hermandad, yo te quiero con mayor intensidad, mi amor por ti es más intenso que cualquier cosa, no es el aire que me mantiene respirando, eres tú y solo tú, no me imagino una vida alejado de ti, hemos vivido tanto tiempo juntos, que no me importa sufrir porque tu no sientes lo mismo que mí, no me pidas ese, no lo cumpliré…-.
“¿Donde  están los yugos cuando se necesitan?”
No quería un ataque de terquedad en este momento, sonreí torcidamente para engañar  y apaciguar lo que me tumbaría.
-¿Quieres vivir sádicamente por la eternidad? Muy bonito Jake-. Me burle. –De todas formas ya lo prometiste, ahora lo tienes que cumplir-. Reitere.
No sufras mas, tu sufrimiento me hiere a mí también
-¿Estas muy segura de lo que dices?-. Dijo inexpresivo, su voz tuvo una nota de amargura.
¡Mil veces peor!
-Si-. Respondí con acritud.
-¿Y porque hasta ahora, eh? Hubiera sido fantástico saberlo desde un principio, ¡Mierda!-. Le pego un puñetazo al abeto mas cercano, lo partió en dos con el golpe, no pude evitar tragar saliva. –Siempre lo supe, siempre… sabia perfectamente que me esperaría al ser participe de esta historia-. Mascullo las palabras como blasfemias. –Como si no fue suficiente con enamorarse de la chica de un vampiro y de paso, enamorarme mas intensamente de su hija, ¡Carajo!-.
Deje que refunfuñara todo lo que quisiera, lo único que no quería era que armara un numerito y mi familia se viera en la obligación de alejarnos y terminar en enemistad.
Casi me llevo un ataque de histeria cuando callo arrodillado en un segundo, se llevo las manos temblorosas al rosto para ocultárselo, me recliné para tocarle el cabello, quería confesarle que me dolía a mí tanto como a él, confesarle que su dolor también era mi dolor, que le amaba pero que nuestro amor nunca llegaría a florecer.
-¿Porqué?-. Se pregunto a si mismo, yo tenia las respuestas, solo tenia que decirlo. -¿Por qué tiene que ser todo de esta manera? ¿No hay salvación? ¿Estoy condenado al dolor hasta el día de mi tan dulce muerte? ¿Por qué no me aparte de Bella cuando la creí muerta? ¿Por qué estuve presente en el alumbramiento? ¿Por qué no simplemente deje que Edward me matara? ¿Por qué?...-. Se lamento.
 Mis lagrimas se desbordaron conforme confeso sus abstracciones internas, sus confesiones hirieron como cuchillas en mi piel, sus palabras fueron gasolina derramada en mis ojos…
-Prefiero la muerte que separarme este día de ti, no estoy preparado, nunca lo estaré-. Susurro casi inaudible en el suelo. –No me imagino una vida sin tu compañía, no me imagino mi muerte sin tu imagen cuando perezca-.
Me acurruque a su lado, intente quitarle una de sus manos de la cara, parecía una gárgola hablante.
-¿Jake?-. Murmure suavemente, intentando apoderarme de sus manos. -¿Jacob?-.
“¡Oh mi amor! Yo tampoco me imagino una vida sin ti, pero debes entender que para mi felicidad, toda mi familia tiene que participar en ello, te amo… yo también te amo, pero entiende que esto no pude florecer, estamos condenados a una vida separada, no hay nada que pueda hacer, nuestro destino se salió de nuestras manos”.
 -Deja el monologo, tienes que marcharte ahora-. Objete.
Sus lágrimas fueron sangre en mis manos, miles de fragmentos de su alma impregnaron mis palmas.
-No tengo que ser melodramático, todo esto es la condena que me merezco-. Levanto su rostro, tomo mi mano derecha y la coloco donde latía desbocado su corazón. –Espero que tu decisión sea irrevocable, porque desde el día de hoy-. Apretó más mi mano en su pecho. –Desde ahora mi lucha será sacarte de aquí-. Me tembló la boca por sus palabras tan hirientes y condenadas. –Tú misma te hundirás sin mí, has sucumbido toda esperanza que guardaba en mí-.
Me postré frente a él, sus palabras doblegaban mis fuerzas, todas ellas eran mi condena no la suya,  yo moriría como una eterna desgraciada, en cambio Jake, lucharía por desterrarme de su alma, muy tarde me había dado cuenta de mis sentimientos hacia él,  muy tarde le había conocido realmente.
-Lo siento…-. Susurre, cerré mis ojos y acaricie con mi nariz la suya, llene de su aroma mis fosas nasales, con mis manos grabe la textura de su piel como una ciega.
Sentí la aproximación de sus labios, sabía perfectamente que su contacto de dañaría aun más, en un futuro cercano.
Abrí mis ojos de par en par en un segundo, salte alejándome de él, dejándolo aun en el suelo húmedo.
-Todo será mejor sin esto-. Murmuré.
-Si-. Dijo al momento de ponerse en pie. –El veredicto esta dictado-.
Ahora venia lo mas difícil, lo que me haría retorcer y gemir en la tumba, lo que haría mis días grises y amargos, de por si era doloroso la despedida cercana, pero mas doloroso seria lo que presenciaría en este momento.
Conté perfectamente los diecisiete pasos que le tomo a Aleah llegar hasta donde nos encontrábamos, tal vez mi esfuerzo por hacer que no llegara a los oídos de mi padre no había funcionado en nada, no seria novedad, no llegaría a ocultarle nada en la vida sin la ayuda de mi madre.
Jacob resoplo cuando lo escucho venir.
-Yo le pedí que viniera-. Dije, secando mis majillas con el dorso de mis manos.
 -Ahora entiendo todo-. Replico después de suspirar.
Lo entendía, sabia que seria mejor de esta manera.
Con cara de vergüenza se acerco tímidamente Aleah, Seth venia detrás de ella, seguramente desconfiaba que le sucediera algo, hice un asentimiento y ella adivino a que se refería.
Jacob estaba receloso, sin duda no esperaba que fuera capaz de pedir favores como este.
-Nessie…-. Murmuró.
-Sera mejor así Jake-. Respondí.
Frunció sus labios, miro desesperado a Seth, como si quisiera ayuda.
-Sera mejor así-. Le dijo Seth, temblando tenuemente.
-Si-. Susurro monocordemente. –Aleah-. Llamo, ella se acerco a él sin vacilación, sabía perfectamente que Seth le protegería si Jake tenía un ataque de exasperación.
En ningún momento no lo quite ojo de encima, obligué mis sentidos a recordarlo siempre, así como sabia que fue para él todos estos años, estaba decidido a aceptar esto, era como si aceptara su condena o como si aceptara sin vacilación la carcelera que le esperaba.
-Nunca quise que fuera de este modo-. Confesé, mi vista estaba pañosa.
-Te entiendo-. Se limito a decir, trague saliva para apaciguar en nudo en mi garganta.
-No dolerá nada-. Dijo Aleah al estar frente a él. Hiso una mueca de dolor en la mención de la palabra “nada”, no habían meritos para asimilarla.
-Eso espero-. Murmuro con la frente en alto.
-¿Qué quieres que olvide Nessie?-. Pregunto Aleah con sus ojos entrecerrados.
¿Por qué todo es difícil y doloroso? ¿Por qué tengo que ser la precursora de tal cruel castigo? 
-Todo-. Se me quebró la voz, pero no soné convincente. –Todo, mis padres, mi familia, ¡todo!-. Afirme con voz clara.
-¿Estas de acuerdo?-. Le pregunto ella.
-Si-. Ella asintió lista para efectuar su poder.
Lleve ambas manos a mi pacho, sentía que en cualquier momento mi corazón saldría disparado y no lo encontraría nunca, seguramente siempre funciono para cantarle a Jake, ahora solo seria un órgano sonoro, inservible y vibrante…
-Una cosa más-. Pidió de repente. –Lo único que quiero recordar, es el rostro de Nessie cuando era bebé, cuando le vi por primera vez, lo demás-. Se encogió de hombros. –Que desaparezca-.
¿Era mucho pedir la muerte inminente que me esperaba?,  a parte que tenía un sufrimiento catastrófico en todas mis entrañas, de paso también tenia que saber que la ultima petición de Jacob era el recuerdo de mi rostro cuando era infanta.
Aleah parecía flacucha a su lado, Jacob se reclino para facilitarle la vida a ella, coloco sus manos en sus sienes para evitar que se escabullera de su mirada, Seth me ofreció su apoyo en ese momento, apoye mi cabeza en uno de sus hombros y deje que me consolara, fui testigo de cómo se dio…
Jacob solo me dedico una mirada furtiva y poso toda su atención a Aleah, ella capturo su mirada, hipnotizado no de desprendió de ella, cinco minutos después que ella se aseguro que lo tenia persuadido le ordeno con voz firme el veredicto.
-No sabes quien es Renesmee Cullen, no sabes nada de ella, de su origen, ¡Nada! Excepto su rostro cuando era bebé, No sabes nada de la familia Cullen ni ninguno de sus integrantes, lo único que sabes es que Bella se marcho con su esposo para ser feliz por el resto de sus vidas, lo demás… olvídalo, no recuerdas sus gustos, no recuerdas su voz, no recuerdas nada de ella-.
Seth apretón mis hombros cuando mis sollozos salieron entre mis dientes.
-Le amo Seth, pero nuestra historia no puede nacer-. Le susurre entre llanto.
-Lo se-. Se limito a contestar. –Ahora vete, regresa a tu casa, témenos todo lo necesario para Jake…-. En su voz no hubo deje de resentimiento, solo comprensión. –No te preocupes más por él-. Me aconsejó. –Jacob olvidara todo-. Prometió.
-Cuídalo por mí-. Le pedí y él asintió.
Jacob parecía estatua parado frente a Aleah, ella seguía enjuiciándolo a olvidar todo lo mío y de mi familia, nunca imagine un final como este, me hubiese encantado vivir mi historia a su lado, pero todo era ficción en mi corazón, tenia que dejar de engañarme, Jacod y Renesmee con congeniaban y nunca llegarían a hacer buenas rimas.
Con profundo dolor sepulcral me aleje de allí corriendo lo mas rápido que podía, obligue a mis piernas débiles y escuálidas no desplomarse, sofoque con mis manos los sollozos que me avasallaban la conciencia, Damon solo fue el producto de la ilusión del amor, lo que de verdad me quiso gritar el corazón es que Jake era el único que podría alegrarlo y hacer de mí, su idólatra y él de mí.
Mis padres no tenían que estar apesadumbrados,  era lo mejor para todos, era mejor para Jacob, él no se merecía vivir en esta situación, era mejor que olvidara todo de mí, aunque el corazón me gritaba que regresara donde se encontraba y viviéramos nuestra historia de amor, no podía, no debía…
Corriendo como el viento, humedeciendo como la lluvia a la tierra, me dirigí aceptando la negrura que seria mi vida desde ahora sin mi razón de ser, sin mi Jacod.





1 comentario:

  1. waaaa...! sinceramente nunca me gusto mucho Jake que se diga, pero siempre quise que tuviera un final feliz, nunca me agrado que se metiera como tierra en las uñas, pero bueno, el nacimiento de Nessie fue conciliador, y la verdad, me dolio este final..! T.T !Pero caray! aqui no termina todo, próximamente subire 5 cap mas, se trataran de los momentos mas sobresalientes he importantes, en su punto de vista.... saionara!!!

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